miércoles, 9 de marzo de 2016

Debemos ser la sal y la luz

Cristo nos mandó a ser la sal y la luz del mundo (Mateo 5 .13.16) La sal mejora el sabor, sirve para preservar y funge como antiséptico, la luz da dirección, aclara el entendimiento y evita los tropiezos y las heridas. Conforme la sociedad moderna se aparta más y más de Dios y sus principios más resalta la importancia de esta tarea y a su vez se vuelve más difícil, cada día más personas viven una vida vacía y cada vez menos receptiva a la sanidad que trae Jesús.
Por ejemplo Cómo podemos convencer a alguien de que hay esperanza para el futuro si ni siquiera creo en un mundo espiritual, Cómo podemos ayudarle a comprender que su pecado y la causa de su problema si ni siquiera cita la idea del pecado; de verdad vivimos en una nueva era, una era en decadencia
Los Cristianos tenemos disponible una herramienta valiosa para lograr en nuestras vidas el milagro de la vida eterna y esta explicado en (2 Pedro 1.19)
Tenemos...la palabra...a la cual hacéis bien en estar atentos como una antorcha que alumbra en lugar oscuro"
*Parte de este articulo corresponde a la Revista La Antorcha de la verdad
Resultado de imagen para la antorcha de la verdad

No hay comentarios.:

Publicar un comentario